La dermatitis atópica también conocida como
piel atópica es un problema crónico de la piel que se caracteriza fundamentalmente por la sequedad de esta, lo que conlleva a su escamación e irritación y provoca síntomas molestos como por ejemplo el picor.
Las personas que tienen esta condición en su piel, suelen tener brotes coincidiendo con los cambios de estación, con el clima poco húmedo, con el estrés o debido a circunstancias diversas como la contaminación de las ciudades, el frío, el clima seco, una higiene excesiva, el cloro del agua o una falta de hidratación de la piel…
En la mayoría de casos, tiene un origen genético, siendo frecuente encontrar varios miembros de la familia afectados de dermatitis en la piel.
La
dermatitis atópica afecta sobre todo a bebés y niños y, en menor medida, a los adultos. En los niños suele aparecer en la cara y en zonas de flexión como los codos, las rodillas, la muñeca, en el cuero cabelludo, en piernas y glúteos. En el caso de los más pequeños aparece una piel seca y descamada, que se desprende con facilidad.
¿Cómo es una piel atópica?

Si deseas
saber si tienes piel atópica, estas son las 5 principales características:
- La piel se muestra seca
- Tienes picor que puede ser especialmente molesto durante las horas nocturnas.
- Lesiones que se manifiestan mediante una piel enrojecida, sobre todo en el cuello y los pliegues corporales.
- En casos más graves, pueden aparecer granitos como si fuesen picaduras o incluso ampollas (más frecuentemente entre los dedos).
- En ocasiones, la piel atópica puede ir asociada a determinados problemas respiratorios como el asma o la rinitis alérgica.
¿Cómo tratar la piel atópica?
- Realiza baños cortos, preferentemente duchas y sin usar jabones, con agua templada para humectar la piel.
- A la hora de secar tu piel, la mejor elección son las toallas o albornoces de algodón o lino. Recuerda hacerlo con pequeños toquecitos para evitar frotar e irritar tu piel todavía más.
- Cuida la piel a diario con un gel de baño para piel atópica y loción hidratante para piel atópica.
- En cuanto a la ropa, evita las prendas con fibras sintéticas.
- En invierno no te excedas con la temperatura de la calefacción. Lo más adecuado es mantenerla en unos 20 – 22º.
- Durante el verano, debes tener especial cuidado con los baños en la piscina ya que el cloro puede empeorar los brotes de dermatitis atópica. Los baños en el mar parecen llevarse mejor con la piel atópica dado el carácter salino del agua.
¡Tener piel atópica exige estar bien atentos!
No obstante, conocer esta condición y las recomendaciones que se han expuesto anteriormente, te pueden ayudar en gran medida a identificar las características de esta tipología de pieles.
Mussvital, 40 años preocupándose por la salud de tu piel